viernes, 26 de febrero de 2010


Sermo pedestris versus sermo alatus (o en defensa de los prosadores),
según Anderson Imbert

Las definiciones tradicionales de prosa son negativas. En vez de decirnos qué es prosa, nos dicen qué no es: "prosa es lo que no es verso". Y como el verso, a lo largo de la historia de la literatura, ha sido normalmente el vehículo de la poesía, por contraste se ha caracterizado la prosa como vehículo normal de lo no poético. Por definirla con la perspectiva del verso (identificando previamente el verso con la poesía), la prosa fue considerada como sermo pedestris. Todavía hoy, a pesar de la brillante historia de la prosa poética, se suele usar la palabra "prosa" en frases despectivas como "prosas de la vida", "una mujer prosaica", "el prosaísmo de un modo de ser o actuar", "gastar mucha prosa", y así. En oposición a esa serie de desprecios a la prosa ha habido otra serie de esfuerzos para honrarla. Y, como se verá más adelante, hay momentos en la historia de la literatura en que los espíritus más poéticos -esto es, más expresivos- son prosadores y no versificadores.

Enrique Anderson Imbert / Qué es prosa


miércoles, 24 de febrero de 2010



Javier Munguía, incansable lector, escritor y crítico ha encontrado un racimo de perlas en el mar virtual, como parte de una nota de Guillermo Altares para el blog Papeles Perdidos, de Babelia:

- "No te sientes en mitad del bosque. Si te pierdes en la trama o no sabes como seguir, vuelve sobre tus pasos". "Rezar puede funcionar. O leer a otro. O tratar de visualizar el Santo Grial que es la imagen de tu libro publicado". Margaret Atwood

- "No pongas una foto de tu autor favorito en tu mesa. Sobre todo si es un suicida". "Ponle un nombre a tu trabajo lo antes posible. Tienes que poseerlo, que verlo. Dickens sabía que Casa desolada se iba a llamar Casa desolada antes incluso de empezar a escribir". Roddy Doyle

- "Termina tu jornada de escritura cuando todavía tengas ganas de seguir escribiendo". "Relee, vuelve a escribir, relee, vuelve a escribir. Si sigue sin funcionar, tiralo. Es sano y no debes sentir mala conciencia por los cadáveres de poemas y páginas que lo tenían todo excepto la vida que necesitaban". Helen Dunmore

- "Los primeros 12 años son los peores". "La mejor forma de escribir un libro es escribirlo. Un bolígrafo es útil, un ordenador también vale, pero sigue llenando la página en blanco de palabras". "Sólo los malos escritores creen que su trabajo es realmente bueno". "Describir es muy difícil. Recuerda que cualquier descripción es una opinión sobre el mundo. Busca un lugar desde el que mirar". "Diviértete". Anne Enright

- "Casate con alquien que te quiera y que piense que ser escritor es una buena idea". "No leas las críticas". "No bebas y escribas a la vez". "No mandes cartas a tu editor (a nadie le importa)". Richard Ford

- "Escribe en tercera persona a no ser que hayas encontrado una voz en primera persona realmente especial". "Cuando la información es gratis y universalmente accesible, una gran investigación para una novela se devalúa como la propia novela". "Tienes que amar antes de poder ser despiadado". Jonathan Franzen

- "Escribe". "Pon una palabra y luego otra. Busca la palabra adecuada. Escribela". "Arreglalo. Pero recuerda que tarde o temprano, antes de que alcance la perfección, tendrás que dejarlo ir y seguir adelante para escribir tu próxima obra. La perfección es como tratar de alcanzar el horizonte. Sigue adelante". Neil Gaiman

- "Aumenta tu capacidad lingüística. Las palabras son la materia prima de tu oficio. Cuanto más grande sea tu vocabulario, más eficaz será tu escritura". "No te limites a planear escribir: escribe. Sólo escribiendo, no soñando con escribir, desarrollamos un estilo propio". PD James

- "No trates de escribir para un lector ideal. Seguro que existe, pero está leyendo a otro". "Sé tú propio editor / crítico. Cercano, pero implacable". Joyce Carol Oates

- "Lee mucho". "Escribe mucho". "Aprende a ser autocrítico". "No te rindas". "Encuentra una historia que merezca la pena contar". "Ten suerte". "Manten tu suerte". Ian Rankin

- "Lleva siempre una libreta contigo. Y quiero decir siempre. La memoria a corto plazo sólo retiene información durante tres minutos: a no ser que lo plasmes en papel, perderás una idea para siempre". Will Self

- "Trata de leer tu trabajo como lo haría un extraño, mejor dicho, como lo haría un enemigo". "No trates de hacer romántica tu vocación. Puedes o no puedes escribir buenas frases. No hay una forma de vida de escritor. Lo que importa es lo que dejas en la página". "Trabaja en un ordenador que no esté conectado a Internet". "Evita los clichés, los grupos, las bandas". "No confundas honores con logros". Zadie Smith

- "Termina todo lo que empieces". "No vayas a Londres". "No vayas a ningún otro lugar". Colm Tóibín

- "Enfrentate a la escritura como un trabajo. Sé disciplinado. Muchos escritores se lo toman muy en serio. Graham Greene escribía 500 palabras cada día. Mi mínimo es 1.000 palabras, lo que a veces es fácil, aunque otras es tan difícil como cagar un ladrillo, pero me obligo a quedarme en mi mesa hasta que lo consigo. Muchas veces estas 1.000 palabras son basura, pero es más fácil volver sobre ellas y mejorarlas". "El ritmo es esencial. No es suficiente con escribir bien. Estudiantes de escritura pueden elaborar una página de magnífica prosa, pero a veces carecen de la habilidad para arrastrar al lector al largo viaje que representa una novela". "No entres en pánico". "El talento triunfa sobre todo esto. Si realmente eres un gran escritor no necesitas aplicar ninguna de estas reglas". Sarah Waters


Guillermo Altares / Blog Papeles Perdidos

domingo, 21 de febrero de 2010



Escribió su novela a los cuatro años y se suicidó a los cinco, según Charlie Kaufman

MADELINE: Hay una brillante novela escrita por un niño de cuatro años.
CADEN: ¿En serio?
MADELINE: Pequeño Winky. De Horace Word.
CADEN: Bonito.
MADELINE: Apenas. Pequeño Winky es un violento antisemita, que trabaja en una destilería de ginebra durante la prohibición. La historia sigue con su iniciación en el Klan, su introducción en la industria pornográfica y su degradación definitiva por parte de un ex-convicto negro, con quien se embarca en una aventura homosexual.
CADEN: ¡Caramba!
MADELINE: Se suicidó a los cinco años.
CADEN: Eso es horrible.
MADELINE: Habría escrito mucho más si estuviera vivo. Hay un libro magnífico sobre él. Desarrollaron un método para adivinar qué habría escrito si hubiera vivido a los diez, veinte, treinta, etc. Parecido a cuando procesan en una computadora la foto de un niño desaparecido.
CADEN: ¿Eso es posible?
MADELINE: ¿Qué parte?
CADEN: Todo. ¿Por qué se suicidó?
MADELINE: No lo sé, ¿tú por qué lo hiciste?
CADEN: ¿Qué?

Charlie Kaufman / Sinécdoque, Nueva York

miércoles, 17 de febrero de 2010



Charla de Andrés Acosta con los alumnos de la escuela primaria
Cayetano Rodríguez Beltrán
jueves 25 de febrero, 11:00 hrs
Santa Fe, Álvaro Obregón



Cosas que se ven en la calle

Sastre para jóvenes

domingo, 14 de febrero de 2010


Cosas que se ven en la calle

Los esquimales no existen

martes, 9 de febrero de 2010



Sobre los comienzos, según Hoffmann

La singularidad de la aventura me había sorprendido, y por eso me atormentaba buscando cómo iniciar su relato de una manera seductora y original.
"Erase una vez"... ¡Lindo comienzo para hacer dormir desde un principio!
"En la pequeña ciudad de S... vivía" o bien entrar de pronto in media res como: "¡Que se vaya al diablo!" -exclamaba con el furor y el espanto pintados en sus extraviados ojos el estudiante Nataniel, cuando el vendedor de barómetros Giuseppe Coppola...
Había, en efecto, comenzado a escribir de esa manera cuando creí ver algo cómico en los ojos extraviados del estudiante Nataniel, y la verdad sea dicha, la historia no tiene nada de alegre. No acudió a mi pluma ninguna otra frase que reflejara ni por asomo la brillantez de colorido de mi imagen interior. Entonces resolví sencillamente no comenzar.

E. T. A. Hoffmann / El hombre de arena

miércoles, 3 de febrero de 2010


Hoy comienza...

Novela Negra en Casa Lamm

DURACIÓN: UN SEMESTRE

Horario: Lunes y Miércoles de 16:00 a 18:00 hrs.

3 de febrero al 7 de junio 2010

Andrés Acosta

Objetivo:
Que el alumno comprenda qué es una novela negra, conozca sus orígenes, los autores representativos, el grado de desarrollo que ha alcanzado hasta nuestros días y, asimismo, sea capaz de proyectar su propia creación dentro del género.

Tel. Casa Lamm: 55253938


martes, 2 de febrero de 2010


Paulina Aguilar, autora de ese gran éxito de novela juvenil El quinto dragón, hace un amable comentario de Olfato en su blog:
Olfato no es una historia convencional. A pesar de que habla de vampiros, no se trata de la misma historia que nos han contado en los últimos años dentro de la literatura juvenil. Olfato no habla del vampiro guapo que se enamora de la chica humana y la hace de héroe durante toda la serie. Olfato, del escritor Andrés Acosta, es mucho, mucho más.

No por nada se ganó el Premio Gran Angular 2009 en México. Ahora, después de haber leído la obra, les doy toda la razón a quienes la eligieron como la novela ganadora. Hoy, cuando el mercado de la literatura juvenil está saturado de vampiros y de historias muy parecidas, Andrés Acosta nos regala una novela única.

El protagonista es un joven mexicano de dieciséis años llamado Fluvio, quien en la primera página declara ser un vampiro. La primera parte de la novela relata cómo Fluvio se convirtió en vampiro y nos lleva de paseo por Europa; desde Berlín hasta los Balcanes.

Un detalle que quiero mencionar es que a mí nunca me ha gustado el Metal; es más, muchas veces lo juzgué mal. Después de haber leído OLFATO tengo curiosidad de saber más acerca del Metal. No sabía que había tantos tipos ni que estuviera tan ligado a la música clásica. Durante la primera parte de la novela, Fluvio y sus nuevos amigos nos dan una clase acerca del Metal. De verdad que aunque no soy fanática, me dieron ganas de escucharlo, de sentir lo mismo que provocaba en los protagonistas.

El lenguaje que Andrés Acosta utiliza es sencillo, lo cual hace que la historia fluya rápidamente y que los personajes parezcan reales. Fluvio podría ser cualquier adolescente mexicano. Además, dentro de la novela encontramos diversos personajes que reflejan parte de los jóvenes del país.

Es una historia muy original, que te lleva por caminos inesperados. Si esperan la típica historia estilo Crepúsculo, éste no es el libro correcto. Olfato es una historia de aventura que explora una rama no muy conocida acerca de los vampiros: los lampires.

A mí me encantó, me pareció una historia fresca entre las decenas de novelas de vampiros (qué la verdad ya me tenían cansada). La recomiendo mucho, espero tengan oportunidad de leerla.

Por lo pronto, los invito a que visiten el blog de Olfato, donde encontrarán cosas muy interesantes: http://como-me-hice-vampiro.blogspot.com/

Por último, una felicitación a Andrés, excelente escritor y magnífica novela.

lunes, 1 de febrero de 2010


Guadalajara, Jalisco. Enero 27 de 2010

Olfato, de Andrés Acosta

Un chico recibe el regalo más sorprendente de su vida: un viaje por Europa. Su nombre es Fulvio, recién ha cumplido diecisiete años y sus padres consideran que puede realizar un viaje cultural por algunos países del Viejo Continente. El recorrido inicia en museos y exposiciones, pero a este chico le apetece más visitar la ciudad de Budapest para asistir al concierto del grupo Lacrimosa. ¿Encontrará más que música, tal vez la muerte?

CRÉDITO: El Informador Redacción / Suplemento ¡Vamos a leer!